Lamentar y rechazar la decisión
del Gobierno Nacional, que cada vez demuestra falta de capacidad, conocimiento
y de sentido común, al quitar el presupuesto para las universidades del país,
ya que aquello es un grave error y además representa una violación a la
constitución. También demuestra el doble
discurso del gobierno, sus ministros y funcionarios de alto nivel, sería de
preguntarles ¿en dónde creen que los médicos, las enfermeras y demás personal
que están ahora mismo enfrentando al virus en primera línea, han sido formados y graduados?.
Para lograr formar a los
profesionales se necesita de docentes, laboratorios y demás infraestructura para
poder llevar a efecto dichos procesos de enseñanza-aprendizaje. Incluso se tendría
que preguntar al Gobierno y ministros ¿dónde se educaron?, claro que a muchos
nos da la idea que han tenido una formación deficiente por sus acciones y
criterios ejecutados.
Ante este tipo de acciones
irresponsables del Gobierno, pues tiene que haber una respuesta de los
afectados directamente como lo son las comunidades universitarias y la
ciudadanía en general. Es hora de unir y
organizar todas las universidades del país para tomar las acciones legales
correspondiente y exigir la derogatoria de dicha decisión, exigir la salida del
Ministro de Economía y otros funcionarios corruptos; apoyar a los estudiantes, docentes y
administrativos a las acciones de lucha que se debe emprender. También motivar a los padres de familia y
ciudadanía en general a elevar su voz de protesta, porque dicha decisión de
Gobierno nos afecta a todos ya sea de forma directa o indirecta.
Por el tema de la pandemia, las
restricciones de movilidad y de protección, en primer instancia habrá que cada
uno expresarnos e incidir desde las redes sociales y medios tecnológicos
disponibles y si no se logra la sensibilidad y derogatoria de la decisión del
Gobierno nacional, pues se tendrá que hacerse la lucha desde las calles en cada
uno de los territorios a nivel nacional.
En dicha movilización no solo se debe reclamar el presupuesto para la
educación, sino también para los otros sectores estratégicos de la sociedad, al
citar algunos: la salud pública, el sector productivo comunitario – que hoy se
ha demostrado que son otros héroes que están proveyendo de alimentos a los
centros urbanos-, el mejoramiento e implementación de la tecnificación del
riego, la creación de canales efectivos de comercialización directos evitando
los intermediarios, etc.
También debemos exigir el cobro
de impuestos no cobrados a los grupos de poder económico, la eliminación de los
salarios vitalicios a ex mandatarios, la reducción de los sueldos de los
Asambleísta y funcionarios de alto nivel
jerárquico, la recuperación de los dineros robados de las arcas de estado por
los actos de corrupción de los anteriores y del actual Gobierno, la destitución
y enjuiciamientos de los funcionarios corruptos y la devolución de los dineros
robados, la reversión de las concesiones
mineras a nivel nacional, porque son un potencial fuente de contaminación de las fuentes de agua, tal como se ha demostrado
que las afectaciones negativas de los pasivos ambientales se quedan en la zonas
mineras y agua abajo a perpetuidad. ¡Ojala, a mediano plazo no se venga una
pandemia de salud pública a consecuencias de las megas contaminaciones que
dichas actividades genera!
Finalmente, dejar claro que la
única forma de salir del subdesarrollo es la educación con calidez, de calidad,
crítica y pertinencia orientada a dar solución a las problemáticas de la
sociedad en general, sobretodo de los que menos tienen. También hay que exigir al gobierno las
garantías de la libre expresión de los ciudadanos y colectivos, porque dicho
derecho está contemplado como un derecho en el Art. 98 de la Constitución y en
el Art. 19 de la Declaración universidad de los Derechos Humanos. ¡Sin
Educación y salud no hay futuro!
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